POLONIA - el país de dónde vengo

Polonia es hermosa ¡Así es! He visitado tantos sitios en el mundo y, aunque muchos me quedan todavía por descubrir, siempre vuelvo a mi país con una lágrima en los ojos, recordando los años de infancia pasados en la naturaleza, en el Beskid Niski - las montañas de mi región de origen - Małopolska.
Sus naturales áreas verdes todavía no contaminadas, son únicas a nivel europeo, mientras que las grandes ciudades y pueblos, se jactan de una cultura muy antigua y lo monumental de sus tierras, que alguna vez fueron habitadas por los grandes reyes polacos.
A menudo durante mis viajes, me encontraba con los viajeros de muchos, a veces muy lejanos y exóticos países, que me sorprendían por su conocimiento de Polonia en el grado, que sospecho muchos de nosotros (mis compatriotas) no tenemos la posibilidad, el deseo o el incentivo, para descubrir los rincones de nuestro hermoso país. ¿Quién de vosotros estuvo en Podlasie y experimentó el unísono de tres culturas y religiones? ¿Quién ha pasado toda la Ruta de los Nidos de Águil? ¿Quién visitó Gniezno y Cracovia, la cuna de la polonidad? ¿Quién estaba en Masuria y admiró la belleza de sus lagos a vista de pájaro, en un globo aerostático, silenciosamente flotando en el cielo?
Creo que cada polaco en su corazón, siempre conectado con su tierra, necesita enamorarse de su país de vez en cuando. Tantos de nosotros que nos fuimos en emigración, muchos para mucho tiempo, extrañamos nuestra patria, pero no lo admitimos. Es por eso que muchos de mis artículos están dedicados a Polonia y sus encantos. Como muchos otros, también emigré, pero nuevamente estoy encantada con la belleza de mi lugar natal y volviendo cada vez, aprecio más todo lo que hay aquí.